Capítulo 23

David está en la biblioteca. No está viendo a nadie interesante. De pronto siente un calor que lo invade. Ve a un macizo, un tío buenorro impresionante. Lo ve de espaldas. No sabe quién es, pero ese culo le fascina. El culo precioso está poniendo los datos en su ordenador, culo en pompa y David se pone muy cachondo viéndole los calzoncillos, se le ve bastante trozo. La goma la tapa el jersey pero a este chico guapísimo se le ven muchísimo los calzoncillos. David se agarra el paquete porque está encendidísimo. Los calzoncillos del chico éste tan macizorrísimo son negros, muy enganchados al cuerpo.
--¡que sexy¡
Lleva un jersey de manga larga marrón pero el jersey le va corto. De pronto le ve la cara. No lo había reconocido (más que nada porque se había centrado en el culo y sus calzoncillos) Ve que es Soufiane. Y así ese culo le gusta aún más.
--¡es que tenía que ser él¡ --murmura.
Soufiane va al lavabo y David tiene que hacer un esfuerzo en no seguirlo para no molestar a Soufiane. Lo que no imagina es que Soufiane no soporta su indiferencia, que le gusta su deseo, cómo lo mira. Lo que no le gusta es sentir que es uno más y por eso le da rabia creer que David se cansó de él. Soufiane busca provocar a David. Se levanta varias veces, pasa por detrás de David. A David le enferma lo mucho que se le ven los calzoncillos a Soufiane. Cada vez que se levanta, Soufiane se baja el jersey que le va muy corto. Jeans muy caídos, se le enganchan toda la tele a la poca carne que hay, se le ve un culito muy pequeño pero muy sexy y David está loco por él. El árabe no tarda en irse. David la tiene de palo. Piensa en encerrarse en el lavabo para desahogarse en solitario pero piensa en Fer.
--¿para qué tengo novio sino?
Mira el reloj. No es muy tarde. David está cachondo… Llama a Fer.
--¡ahora vengo¡
David es muy agresivo. Fer está encantado porque David hacia días que no quería estar con él. David cierra los ojos. Piensa en Soufiane. Fer jadea.
--te amo David.
Y David sólo está pensando en su árabe.
--te amo Soufiane…
Fer le para de golpea.
--¿¿qué dijiste?
David tiene cara de no querer parar, de necesitar descargar.
--¡para¡ ¡¡para¡ --furioso.
--no me hagas esto… --jadea David.
--¿¿Qué es Sufain?
David se queda casi en shock.
--¿¿Sufain?¿qué eso?
--No sé… --jadea David.
--me llamaste así…¡¡
--No es verdad… --jadea David.
David tiene su verga apunto de reventar.
--¡venga Fer… almenos chúpamela pero no me dejes así¡
Fer está muy furioso. No se ha querido dar cuenta que a David le pasa algo pero está seguro que estaba pensando en otra persona mientras hacía el amor con él. Fer quiere hablar con él, quiere que le explique porque lo llamó de esa manera. David lo que quiere es venirse, lo hace encima de Fer llenándolo de esperma.
--¡qué haces¡ ¡¡eres un guarro¡
David está ya más relajado:
--siempre te ha gustado mi leche…
--¡es que me has salpicado hasta en la cara¡
Fer está molesto porque ha notado a David muy agresivo. Se da cuenta que necesitaba descargar por algo. Hacía días que ponía excusas para no estar con él y ahora lo ha notado muy distante, sólo le importaba meterla. David se empieza a vestir. Fer se queda desnudo y lleno de leche.
--¿ahora te vas?
--¡sí es que tengo prisa…¡
Fer se ha sentido un objeto sexual, en otro momento no le importaría pero es que está seguro que David lo ha usado para descargarse por algo y que podría haberlo hecho con cualquiera.
--¡almenos ayúdame a limpiarme¡
David le tira a Fer un jersey de Fer y va hacia la puerta. Fer está bastante salpicado de semen, no sabe por dónde empezar y además está molesto.
--Vete y piensa en qué es lo que quieres…



Al día siguiente, David llega a clase. No tiene claro sus sentimientos pero han vivido muchas cosas con Fer y no quiere perderlo. Y menos por nada en concreto. Se muestra más cariñoso.
--Perdona por lo de ayer… Te juro que no sé qué coño te dije…
Fer tampoco puede asegurar que lo que dijera fuera un nombre de persona.
--Fui un tonto, igual me dejaste mal…
--Tú me dejaste con las ganas… Me interrumpiste la corrida.
Ambos se tratan con cariño.
--Lo siento… esta tarde te compenso…
Ayer David estaba caliente, necesita descargar pero esa mañana lo único que quiere es que se haga la tarde y ver a Soufiane.
--No puedo… tengo que acompañar a mi yaya al médico.
--¿no será una excusa? ¿te quieres vengar de mi? –Fer triste.
Fer siente distante a David pero él quiere luchar por esa relación.
--no, en serio. Si quieres puedes venir con nosotros.
Y David por un momento teme que le diga que sí.
--No, ya sabes que odio esos sitios…
David resopla aliviado. Fuerza una sonrisa. Besa a Fer.
--venga, vamos a clase…
David va a clase contento, deseando que llegue la tarde. Fer lo mira con intensidad, intenta averiguar que le puede estar pasando.

En ese mismo momento, Soufiane está en la biblioteca. Llega Ibrahim, pantalones a cuadros. Camiseta de manga corta. Sin afeitar. Se ve maduro. Soufiane lo mira y le impacta. Lo tiene visto pero nunca se había fijado sexualmente en él. Le gusta. Le gusta mucho. Se le ve la goma de los calzoncillos. Es de la bandera gay. Su trasero aplastado no le gusta nada pero le gusta ese chico y le pone cachondo que diga “abiertamente” que es gay. Siente que es una invitación a su cama. Soufiane lo mira fijamente. El uno clava su mirada en el otro. Se miran durante toda la mañana. En el momento que Soufiane se iba a ir, Ibrahim pasa por su lado y le roza la mano con disimulo. Los dos arden. Acaban en casa de Ibrahim. Los dos desnudos, chupándoselas. Luego Ibrahim se cubre con el condón. Le hace daño porque la tiene grande y tampoco tiene cuidado pero luego no deja que se la meta Soufiane, se burla porque la tiene pequeña, minúscula comparada con la de él y se viste riéndose, diciendo que para qué le va a meter eso que no le hará ni cosquillas. A Soufiane le duele que se burlen de él por no estar bien dotado (aunque el caso es que Ibrahim lo está demasiado) pero además es que Ibrahim le gusta y mucho, le gustaba para repetir y le duele que lo haya tratado mal. Además se ha quedado con ganas de descargar. Llama a Kamel que siempre está disponible y hay confianza y sabe que lo trata bien y se preocupa de su placer.